jueves, 27 de septiembre de 2012

"Que tengas un buen día" - Capítulo 5 ("Bares del puerto")


    “Bares del puerto” es el quinto corte de “Que tengas un buen día”. Cuando tenía doce años me preguntaba si los músicos no se pudrirían de sus propias canciones en esas giras tan largas. Observaba las agendas de algunos grupos que me gustaban y veía que tocaban hasta cuatro veces por semana. Lo cierto es que creí llegar a la conclusión de que cuando uno toca una canción que le entusiasma y la vive como cuando la compuso, la magia permanece durante mucho tiempo. Creo que es lo más importante para tratar de transmitir sensaciones con las canciones. La expresión y la magia deben conservarse y más aún en directo. 

        Cuando comenzamos a tocar tuvimos un mes de composición y ensayo a día completo. Al llegar septiembre teníamos una grabación prevista y el resultado de la misma sería nuestra primera maqueta. En esa primera maqueta incluimos esta canción. Recuerdo que nos gustó mucho desde el comienzo. Nos entusiasmaba tocarla y nos entusiasma tocarla ahora también. Es por eso por lo que decidimos volver a interpretarla en esta segunda grabación. Probablemente sea el tema que más hemos tocado en directo. Salvo alguna excepción puntual, es un tema habitual en nuestro set list. La hemos tocado en tantas salas y en tantos ensayos que hasta hemos hecho nuevas versiones. También la hemos unido con otras canciones y la hemos escogido para invitar a amigos como Alberto da Sinda, Tomás Porteiro de Sinestesia o Samuel Leví a cantar con nosotros en determinadas ocasiones. Además, "Bares del puerto" ha sido escogida como banda sonora de una videocreación realizada en el 2009.






        Él último trago siempre sabe mejor al unísono en un momento preciso. Lo cierto es que es una canción triste que habla de los desaciertos continuados y de las caídas encadenadas en una rutina monótona. No para tomar como ejemplo pero sí para plasmar la sensación de un momento determinado. Muchas veces las canciones son el gran remedio a las complicaciones del día a día. 

        Durante esta segunda grabación quisimos conservar la esencia del grupo tocando en directo así que quisimos interpretarla de forma similar a la toma de "Cosa Fina". Buscábamos captar el sonido natural del grupo tocando en el estudio. Empleamos un wahwah para una segunda guitarra de arreglos puntuales. Volvimos a contar con Miguel Sucasas en los arreglos de saxo y creo que ha estado muy acertado con su interpretación. Es curioso pero cada vez que escuchamos su saxo sabemos que es él, y es algo realmente mágico. Nos compenetramos genial y es un gustazo tocar con un músico con tanta personalidad y tan buen gusto. Hemos alargado el tema con un nuevo final y el resultado es este. Esperamos que os guste:



2 comentarios:

  1. Este es mi tema preferido de siempre. Tiene un encanto especial. Creo que va con mi carácter. Un toque de pesimismo, de desazón, de bohemia. La canción da para sumergirse en ella. Puedes hacer casi un directo sólo con ella. Es más un estado que una canción. Un lugar común. Vuestro sonido se representa genial aquí. Es parte de vuestra historia como músicos y como artistas. Es parte de mi vida.

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  2. Obrigado pela homenagem!
    Siempre me he sentido un privilegiado por poder compartir escenario con vosotros, a pesar de que nunca pudimos darle una vuelta a la canción en ningún ensayo (malditas agendas). Bares es un tema que me trae muy buenos recuerdos, a pesar de su temática -siempre me imagino protagonizando ese videoclip... y a veces, hasta creo haberlo hecho, sólo que allí no había nadia para grabarlo- y probablemente es el tema que más veces he escuchado. Es un tema habitual de mis vueltas a casa, cuando conduzco hecho polvo después de un bolo, a las tantas, por cualquier carretera de la geografía gallega en busca de la luz herculina que me guíe y me impida dormirme al volante. Recojo mis bártulos y mientras cierro el maletero, siempre veo algún bar con luces apagadas y sillas en la barra, y camareros mayores con másteres de vida aferrados a una escoba, borrando lo que queda del día. Enciendo el coche y recorro los primeros kilómetros con mis vigueses favoritos, pensando que aún me quedan muchísimos bares que visitar...
    Gracias, Caraba.

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